Los profesionales están preocupados ante el quiebre de la cadena de pagos y los vencimientos de alquileres, servicios y cargas sociales, fruto de la emergencia sanitaria que dispuso el Gobierno nacional para frenar el coronavirus. Por eso, reclaman medidas para aliviar estas y otras obligaciones.

Hasta el momento, el Gobierno nacional y provincial pusieron el foco en la contención de sectores más vulnerables de la economía, como los trabajadores informales y los monotributistas de categoría más baja.

Si bien los dirigentes consultados se mostraron de acuerdo con las medidas sanitarias adoptadas por el Gobierno nacional y recomendaron respetar el aislamiento obligatorio, comenzaron a mostrarse preocupados por los vencimientos ante al Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip).

“Desde la Federación Argentina de Consejos Profesionales de Ciencias Económicas (Facpce) pedimos prórrogas para los vencimientos de Afip. También otro tipo de alivios para las cargas sociales y para quienes tengan empleados. Y solicitamos la posibilidad excepcional de que nuestros profesionales puedan ir a sus estudios a buscar sus computadoras para cumplir sus obligaciones”, señaló José Simonella, presidente del Consejo Profesional de Ciencias Económicas (CPCE).

Para el economista, los profesionales están entre los sectores que peor la van a pasar en la crisis que va a sobrevenir.

“Esta situación de caída de demanda se va a sostener algunos meses más. Cuando termine el aislamiento, la actividad no va recuperar su ritmo en el corto plazo”, agregó.

Hasta ahora, la cifra extraordinaria decretada por el Gobierno nacional de 10 mil pesos sólo alcanza a las categorías A y B del monotributo, que tienen un tope de facturación de 26.092 pesos y no a todos los profesionales.

De acuerdo con un el último estudio realizado por el observatorio de Federación de Profesionales Universitarios de Córdoba (Fepuc), aproximadamente el 50 por ciento de los profesionales trabaja de manera independiente en la provincia. El promedio de ingresos se ubica en 40.334 pesos. Sin embargo el 70 por ciento de los matriculados gana por debajo de ese promedio, señala el informe.

Brecha de género

La brecha de género también se evidencia entre los profesionales independientes. Mientras que la hora promedio de un profesional hombre cuesta 228 pesos la de una mujer, 179 pesos. Además las mujeres representan el 50 por ciento de los ingresos del hogar.

“Enviamos una nota a la Afip para que tenga ciertas contemplaciones con el pago del monotributo. Estamos esperando algunas medidas más de las que ya se anunciaron. La situación más compleja la padecen aquellos que tienen trabajo unipersonal o lo hacen en estudios pequeños, que han visto reducida drásticamente la posibilidad de trabajo. Hacemos hincapié en el carácter alimentario de los honorarios”, indicó Nora Vilches, presidenta de la Fepuc.

Con la tecnología y las consultas online, algunos profesionales generaron una alternativa de ingresos frente a cuarentena, aunque no iguala el nivel de ingresos habituales. Pero a otros, que dependen de los servicios públicos, como es la Justicia, vieron cerrada casi totalmente su actividad.

“Sin lugar a dudas la cadena de pagos está rota. La falta de circulación de personas hace también que no haya consultas. Le estamos proponiendo al Tribunal Superior de Justicia (TSJ) la inmediata implementación de las audiencias virtuales más allá del proceso penal, donde ya se usan”, señaló Ignacio Segura, presidente del Colegio de Abogados de Córdoba.

En este marco, el abogado agregó el parate total de la actividad judicial. “A nivel nacional hemos hecho una presentación con la Federación Argentina de Colegios de Abogados (Faca) y aquí le planteamos al Tribunal Superior de Justicia (TSJ)  que agilice la liberación de las órdenes de pago de los honorarios profesionales”, señaló Segura.

Para otros sectores la cuarentena tiene un impacto en toda su industria, como es el caso de la construcción. En este marco, la Regional 1 del Colegio de Arquitectos de Córdoba está analizando medidas para sus profesionales.

“La preocupación más grande tiene que ver con el trabajo no solo de los arquitectos, sino de todo el rubro. Tenemos un porcentaje de trabajadores independientes y en la construcción hay muchos de características informales”, dijo Diego Peralta presidente de la entidad.

Impuestos. Los vencimientos impositivos es una de las grandes preocupaciones de los profesionales. (La Voz / Archivo)