Pink publicó en su perfil de Instagram que tanto ella como su hijo Jameson de tres años dieron positivo para coronavirus hace dos semanas y que en los últimos días un estudio reveló que ya no tienen la enfermedad.
“Hace dos semanas, mi hijo de tres años, Jameson, y yo mostramos síntomas de COVID-19”, escribió. “Afortunadamente, nuestro médico de atención primaria tuvo acceso a las pruebas y obtuve un resultado positivo. Mi familia ya se estaba refugiando en casa y continuamos haciéndolo durante las últimas dos semanas siguiendo las instrucciones de nuestro médico”, agregó.
“Hace solo unos días nos hicimos la prueba nuevamente y ahora afortunadamente fue negativo”, dijo llamando a la tranquilidad.
La cantante se refirió al virus como “serio y letal” y señaló al gobierno estadounidense de no trabajar lo suficientemente rápido para la detección de contagiados.
“La gente necesita saber que la enfermedad afecta a los jóvenes y mayores, sanos y no saludables, ricos y pobres, y debemos hacer que las pruebas sean gratuitas y más accesibles para proteger a nuestros hijos, nuestras familias, nuestros amigos y nuestras comunidades”, continuó.
Por otra parte, anunció que donará un millón de dólares para ayudar a combatir la pandemia. La mitad será destinada al fondo de emergencia del hospital de la Universidad de Temple, en Filadelfia en honor a su madre, quien trabajó allí durante 18 años. El resto del dinero será donado al fondo de crisis de emergencia de Los Ángeles.
“Gracias a todos nuestros profesionales y a todos en el mundo que están trabajando tan duro para proteger a nuestros seres queridos. ¡Ustedes son nuestros héroes! Las próximas dos semanas son cruciales: por favor, quédense en casa”, concluyó.