En España, la situación se agrava día a día por la pandemia del coronavirus. En aquel país ya hay más de 10 mil muertos por coronavirus, después de un nuevo máximo diario de 950 fallecimientos en las últimas 24 horas.

En las últimas horas se difundió la carta abierta de una enfermera española que cuenta la crudeza de su labor por estos días, en los que no tienen descanso y tampoco pueden despedir a los seres queridos que mueren.

“Soy enfermera de un gran hospital de la Comunidad de Madrid. Aunque podría escribir acerca de muchas cosas, hoy quiero contar la historia de una compañera de carrera”,  escribió la enfermera que trabaja que trabaja en Atención Primaria, en una carta abierta que envió al periódico ABC

“Su padre ha fallecido por el Covid-19. Estaba en una residencia de Madrid aislado y mi compañera, mi amiga, ha estado yendo como voluntaria en su tiempo de descanso para poder colaborar en la asistencia sanitaria a los ancianos de esa residencia y poder ver a su padre. Una gran ventaja ser enfermera”, agregó.

En la carta, la enfermera contó que después de que el hombre falleciera durante la madrugada, su compañera fue a trabajar igual que lo hace cada día. “Esta mañana ha tenido que ir a su centro de salud, ponerse el pijama y atender a sus pacientes porque estaban suspendidos los permisos, también los de fallecimiento”, relató.

La enfermera insistió sobre las contradicciones de celebrar el trabajo del personal sanitario mientras los organismos vinculados a la salud los obligan a trabajar en cuestionables condiciones. “Y nos llaman héroes… Vamos a trabajar sin los equipos de protección necesarios”, dijo con pesar.

 “Tenemos contacto con el Covid-19, y si no tenemos síntomas, vamos a trabajar, se muere nuestro padre y vamos a trabajar. Esto no es heroicidad ni vocación. Esto es inhumano”, agregó.

(DPA).