El 19 de febrero de 2019 un video en particular quebró la monotonía del canal de YouTube del dúo pop más importante de las últimas dos décadas en nuestro país.
“Por primera vez, Ale abre las puertas de su estudio, donde se componen y graban los discos de Miranda!”, aclaraba el epígrafe del audiovisual en cuestión, que en su título anunciaba una invitación a adentrarse en el espacio de trabajo de una de las dos mitades del proyecto responsable de hits indelebles como Traición, Enamorada, Don, Mentía, Perfecta o Fantasmas.
Algo más de un año después, ese tipo de contenidos se han vuelto cada vez más normales dentro del perfil youtubero de la banda. De hecho, Ale Sergi ya parece todo un experto en el arte de transmitir conocimientos y experiencia a través de una pantalla, como uno más de los tantos creadores de videoblogs que habitan la nube.
Sin embargo, la novedad no pasa tanto por lo que allí sucede –consejos para grabar voces, trucos a la hora de trabajar en el estudio, recomendaciones sobre herramientas específicas-, sino por quién está al frente de un espacio virtual invaluable para amantes del audio y la ingeniería de sonido. Para un compositor de la talla del frontman de Miranda!, exponer su bagaje de conocimientos es también abrirse a un nuevo tipo de vínculo con el mundo online.
Puertas abiertas
“Es entender el nuevo mercado y el nuevo comportamiento del consumidor y las nuevas formas que tienen los creadores (artistas, músicos, etc.) de monetizar lo que saben”, analiza Daniela Díaz, música y especialista en marketing digital y redes sociales.
“Antes había un freno, que era el acceso a las herramientas para crear. Hoy todos tenemos herramientas, aunque sean rudimentarias. Entonces la diferencia quizás está en la experiencia y la vivencia de cada uno”, expone. En ese sentido, pone el ejemplo de youtubers enfocados en la divulgación musical como el español Jaime Altozano o el colombiano Alvinsch. “Hoy por hoy crear música es lo mismo que crear una receta de cocina o un truco de magia, filmarlo y subirlo a las redes. Se consume de la misma manera”, apunta Díaz.
“Lo que hace Sergi me parece recontra relevante para fans, pero también para curiosos y especialistas. De alguna manera también está ampliando su potencial público al abrirse al campo de lo que es la grabación. Quizás a través de esa información personas nuevas lleguen hasta la música de Miranda! Me parece una lectura acertada del nuevo mercado”, reflexiona la community manager (@lasaventurasdedani en Instagram).
Esta apertura que destaca Díaz es, también, un signo de época visible en la dinámica hiperconectada que atraviesa al mundo digital. Pero también supone una apuesta por un vínculo más directo, con otro acceso al universo más íntimo de quien se sienta frente a la cámara.
“Me parece que Sergi es natural para hablar, se nota mucho cuando las cosas son forzadas. Genera un acercamiento a full”, expresa Díaz. “Hay una cuestión social, un diálogo, que es ahí donde reside el gran cambio de cómo consumimos y cómo creamos. A la vez que creamos somos consumidores de lo que crean los demás”, puntualiza.
Rienda suelta
Más allá de cómo puede llegar a posicionarse Sergi en el ecosistema digital a partir de estas intervenciones y del capital simbólico (y hasta económico) que le puede traer aparejado, todo indica que el cantante de Miranda! comparte este tipo de videos por un impulso propio y una pasión explícita por el oficio de componer y grabar canciones.
“No sorprende esa gentileza de una persona como es Ale. Es muy generoso, al punto de habernos prestado hasta instrumentos para tocar en Capital Federal”, comenta Gastón Pérez Rivera, cantante del trío villamariense De la Rivera. “Además es un fanático del estudio de grabación, nos confesó que se cuelga horas probando distintos gears con los que se equipa constantemente”, agrega.
Junto a sus compañeros de banda, Pérez Rivera ha compartido idas y vueltas creativas con Sergi, que aparece en dos tracks (Carolyn y Déjalo) del más reciente disco del grupo, A la deriva (2018).
“Nunca estuvimos produciendo juntos en un estudio pero si componiendo. Es una máquina, tiene muchísimo oficio y escribe de una forma muy simple, casi haciendo freestyle te diría”, explica Pérez Rivera.
En definitiva, los tutoriales que aborda Sergi desde el canal de YouTube de Miranda! tienen que ver con su propia inercia productiva. En tiempos en los que la música también es discurso audiovisual que se comparte y se discute, el artista encuentra nuevas formas de seguir creando.
Pérez Rivera lo ilustra con un ejemplo: “Antes de componer con él yo pensaba que haciendo una canción en un día estaba hecho, pero cuando nos juntamos y terminamos la primera composición dijo: ‘¿Se tienen que ir? ¡Hagamos otra!’”.
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