El complejo industrial de molienda de soja ubicado en los puertos del Gran Rosario es el más competitivo del mundo. Es por ello que Argentina es el principal proveedor mundial de aceite y harina de la oleaginosa, sus productos de mayor valor agregado.
Para ratificar ese lugar en el comercio internacional, un grupo de 10 compañías –entre las que se destaca una cordobesa– son referencia en la provisión de ambos derivados.
Durante el año pasado, las exportaciones de aceite y harina alcanzaron a 40,12 millones de toneladas, de acuerdo con datos de la Subsecretaría de Mercados Agropecuarios de la Nación.
El volumen 2019 representa un aumento del 20 por ciento respecto a lo embarcado en 2018, cuando se registraron 33,33 millones de toneladas.
Buena parte de este mayor desempeño se explica en la mayor producción nacional de soja, que contribuyó a la mayor cosecha de granos de la historia.
Tonada cordobesa
A la hora de identificar a las empresas que llevan a cabo estas operaciones de comercio exterior, el ranking lo encabezan dos compañías familiares de capitales argentinos; una de ellas cordobesa.
Se trata de Aceitera General Deheza (AGD), cuya sede central está en la ciudad homónima del departamento Juárez Celman.
Entre las plantas ubicadas en Córdoba y en el Gran Rosario, AGD exportó el año pasado 5,8 millones de toneladas de subproductos de la soja: 5,07 millones de toneladas de harina y 782 mil toneladas de aceite, de acuerdo con las estadísticas oficiales.
Ese desempeño le permitió ocupar el segundo lugar en los embarques de ambos productos, con un incremento de 32 por ciento en el volumen respecto a 2018, cuando había operado 4,4 millones de toneladas.
Con 3,9 millones de toneladas enviadas en 2018, AGD había liderado el ranking nacional de provisión de harina de soja.
El desempeño de la compañía cordobesa en la industrialización y exportación de derivados de la oleaginosa no es nuevo; desde que el complejo argentino comenzó en los últimos 20 años a liderar el mercado mundial, su presencia siempre ha sido destacada.
¿Quién es la primera?
En un rubro donde las empresas multinacionales suelen sacar ventajas, por su escala financiera y productiva, la venta al exterior de harina y aceite de soja es liderada por empresas con otro perfil.
De la misma forma que AGD, perteneciente a la familia Urquía, ocupa el segundo lugar, el primero es también para una empresa familiar: la santafesina Vicentin.
Con 7,4 millones de toneladas, la compañía –que está atravesando dificultades financieras y espera la apertura de su concurso preventivo– mostró en 2019 un crecimiento en los envíos del 50 por ciento. En 2018, entre harina y aceite había colocado 4,9 millones de toneladas.
Si a la venta de los subproductos se le suman las exportaciones de granos (el “poroto” de soja, maíz, trigo, sorgo, cebada y girasol), el ranking ya cambia su conformación. Durante 2019, la compañía china Cofco lideró las ventas con más de 13 millones de toneladas.
AGD se ubicó en el sexto lugar con 9,03 millones de toneladas y la Asociación de Cooperativas Argentina (ACA), en el décimo.