Este miércoles se cumple un año del fallecimiento de Niki Lauda, el piloto austriaco que se transformó en leyenda de la Fórmula Uno y en ejemplo de resilencia para salir adelante de uno de los accidentes más brutales que tuvo “la Máxima” a lo largo de su historia.

Lauda falleció a sus 70 años debido a diversas complicaciones de salud. En 2018 había sido sometido a un trasplante de pulmón, se sumó una fuerte gripe a inicios de 2019 y su organismo comenzó a tener cada vez menos fortaleza para sobreponerse a su delicado estado de salud.

Fue tres veces campeón de F1 y su carrera deportiva es ejemplo de renacimiento tras un grave accidente. Su valentía y talento le permitieron volver a ser campeón del mundo, superando miedos, complejos y ratificando su talento a bordo de un auto.

En 1975 conquistó con ferrari su primer campeonato del mundo. En el 1976 defendía su cetro y parecía encaminarse a una nueva conquista ecuménica, pero sufriró el accidente en el Gran Premio de Alemania, que marcó a la F1 para siempre.

Sobre la húmeda pista de Nurburgring, con apenas dos vueltas de carrera, Lauda perdió el control y terminó impactando contra una barrera de metal. Tras el choque, el monoplaza regresó a la pista envuelto en llamas.

Tras varios segundos en medio de las llamas, Lauda fue rescatado por otros pilotos y auxiilares. Como consecuencia, el austríaco sufrió quemaduras de tercer grado que le afectaron el rostro, cabeza, manos y pulomones.

En el hospital en el que estuvo internado recibió hasta la extremaunción por parte de un cura, pero logró sobrevivier y regresar a las pistas. Si bien no pudo lograr el campeonato (lo ganó el inglés James Hunt), sorprendió a propios y extraños con su recuperación. Todo esto puede verse en la película Rush.

Después, alcanzó dos cetros más: en 1977 (Ferrari) y en 1984 (McLaren).

Se retiró en 1985 y se convirtió en empresario de líneas aéreas, escribió libros, fue consejero de Ferrari, director de Jaguar y, en 2012, se convirtió en presidente no ejecutivo de Mercedes, para ser pieza clave en el fichaje del británico Lewis Hamilton, la estrella actual de la F1.

Niki Lauda, una enorme figura de la Fórmula Uno. (AP/Archivo)
Hunt y Lauda, los dos pilotos que inspiraron una película de Hollywood por la temporada 1976. (AP/Archivo)
Lauda fue tres veces campeón.La primera, en 1975, con esta Ferrari. (AP/Archivo)
El homenaje de Hamilton a Lauda, cuando se conoció sobre el fallecimiento del austríaco. (AP/Archivo)