Jerusalén. El líder opositor israelí, Benny Gantz, juró formar un gobierno que no incluya ni al imputado primer ministro Benjamin Netanyahu ni a los partidos árabes en el Parlamento.
En una serie de entrevistas televisadas ante de las elecciones generales, Gantz intentó proyectar confianza de que las elecciones del 2 de marzo ofrecerán un resultado decisivo que evitarán otro proceso, como ya ha ocurrido dos veces.
El partido Azul y Blanco de Gantz actualmente supera al Likud de Netanyahu, aunque ninguno parece tener el camino libre a la mayoría parlamentaria requerida para formar un gobierno de coalición.
Gantz expuso dos posibles trayectorias durante una entrevista con el noticiero de Canal 12 la noche del sábado. Dijo que se asociará con una amplia extensión de partidos “judíos y democráticos’’, incluido el partido ultranacionalista dirigido por Avigdor Lieberman, o bien podría unirse al gobernante Partido Likud, pero sólo sin la presencia de Netanyahu, quien está bajo proceso por corrupción.
“Netanyahu acabó con su histórica participación desde un punto de vista político. El Likud con Bibi no puede formar un gobierno, y sin ‘Bibi’ hay unidad’’, dijo llamando a Netanyahu por su apodo.
Gantz, un exjefe militar, realizó una enérgica campaña en un intento por obtener una victoria contundente al acercarse la elección. En principio, estrechó su vínculo con Lieberman, cuyo partido nacionalista Yisrael Beitenu surgió del campo del ala derecha de Netanyahu y provocó una crisis que llevó a varias elecciones.
Lieberman descartó participar en un gobierno con Netanyahu y condicionó su participación sólo si quedan excluidos los partidos judíos ultraortodoxos, puesto que considera que han ejercido un poder desproporcionado.
“La era de Netanyahu llegó a su fin’’, dijo Lieberman el sábado, mientras expresaba una reciente apertura a participar en un gobierno con los partidos de izquierda que alguna vez evitó.