Con la demanda acentuada en los últimos días, algunos supermercados y grandes bocas de alimentos y bebidas recibieron este viernes inspectores de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip).
Las visitas, sin embargo, no estuvieron vinculadas con el control del cumplimiento fiscal, sino con el abastecimiento y los precios de la mercadería, indicaron ejecutivos de cadenas supermercadistas.
En el marco de las medidas contra el coronavirus, el Gobierno retrotrajo al 6 de marzo los precios de alimentos, bebidas, productos de higiene y tocador sobre 50 categorías diferentes. Eso es lo que salió a mirar la Afip sin que se conozca, por ahora, si se labraron actas de contravención.
“Hoy la Afip controló el stock y precios de todo el negocio y está todo en orden”, comentó un operador mayorista. La línea de alimentos que presenta mayor debilidad de abastecimiento es la de la leche larga vida, donde las lácteas aplican turnos de entrega según sus ritmos de producción.
El Ministerio de Desarrollo Productivo también analiza una lista de 2.100 artículos cuyos precios serán controlados en la escala más chica de la cadena como almacenes y autoservicios.
Productos frescos
El abastecimiento de alimentos frescos en las grandes bocas fue, aún con algunas vicisitudes, normal. De hecho el Mercado de Abasto de Córdoba funcionó de 12 a 19 para el despacho de frutas y verduras lo que permitió también a los negocios de barrio comprar mercadería. Ese espacio dispuso ampliar los horarios para espaciar la afluencia.
El sector primario de la economía, los quinteros y productores agropecuarios, están habilitados a trabajar por el decreto presidencial que impuso la cuarentena. El Mercado operará el lunes de 5 a 11, es decir una hora más de atención al público que lo habitual. La única restricción pasa por dos personas por vehículo y no se permite el ingreso de niños ni adultos mayores.
Para el martes, ese mercado estará cerrado pero volverá a abrir con normalidad el miércoles a las 12, señaló Juan Perlo, titular de la Asociación de Productores Hortícolas. Se acentuó, además, la demanda de mercadería a los puestos a través de WhatsApp, con lo cual los clientes eligen en forma virtual y solo concurren para pagar y retirar, explicó.
“Hay un incremento de alimentos a nivel general y las frutas y verduras están en esa tendencia”, indicó Raúl Romero de la Cámara de Operadores Frutihortícolas de Córdoba. Los faltantes están vinculados con regiones donde no se ha permitido la cosecha, como el caso de cebolla o de inconvenientes climáticos, como con la papa que llega de Buenos Aires.
Mientras se mantenga este clima, “no habrá ningún tipo de faltantes, subió el precio de la papa pero bajó fuerte el tomate, y subió mucho la venta de cítricos por las recomendaciones médicas”, agregó. En otra situación podrían quedar productos como bananas y paltas que son importadas y llegan en camión desde el exterior.
Frigoríficos con faena
En tanto, las plantas frigoríficas próximas a Córdoba Capital también funcionarios en un marco de normalidad. “La faena y el reparto no tuvieron contratiempos; todas las carnicerías están abastecidas pero el cliente igual compra para guardar”, señaló Daniel Urcía, titular de la asociación Afic.
Los frigoríficos cuentan con importantes dotaciones de personal pero las empresas generaron los salvoconductos y no se verificaron inconvenientes en el traslado de recursos humanos dado que el personal atravesó los controles con sus recibos de sueldo, explicó. “Hubo problemas menores lógicos”, dijo Urcía.
Compromiso fabril
La Unión Industrial Argentina (UIA) remarcó ayer que conformó un comité de crisis con autoridades gubernamentales para seguir los problemas que puedan plantearse a nivel regional con la producción y el abastecimiento.
“El sector industrial está comprometido con esta tarea que implica proveer de todo aquello que produce diariamente en cada región de Argentina”, puntualizó la entidad.
E-commerce. Mientras tanto, la empresa de paquetería OCA comenzó a comunicar ayer a sus clientes que a partir del miércoles próximo retomará la distribución de los envíos. Ello incluye todos los productos postales, incluyendo el servicio de medicinas a domicilio.
Esto no implica que la venta por e-commerce retome su ritmo dado que no son pocos los centros de distribución de grandes tiendas que paralizaron por completo su actividad.