Daniel Griboff tiene apenas 46 años, pero el aplomo de una trayectoria consolidada. Su empresa, Dagri SA, se dedica a servicios de consultoría, despachante de Aduana y coordinación general de cargas y de outsourcing.

–¿Qué rol puede jugar Córdoba en el comercio global de la próxima década?

–Córdoba siempre se caracterizó, por esta cuestión mediterránea, por ser creativa y, de alguna manera, por rebelarse ante determinadas cuestiones. Hemos buscado siempre ser competitivos.

–¿Qué rubros serán la punta de lanza para una integración más inteligente y beneficiosa?

–Tenemos industrias que han trascendido las fronteras, en la parte alimentaria, y en este momento, en virtud de la ley de economía del conocimiento, estamos pensando en firmas que se están internacionalizando y creciendo en la industria del software. Todo el mundo está preocupado y pensando, de aquí a 10 años, en la necesidad de agregar valor. En ese sentido, veo a Córdoba con una estrategia propia para posicionar sus productos en el mundo.

–Así como existe la marca país, ¿sería ilógico pensar en una marca Córdoba?

–Para mí sería una estrategia brillante, diferenciarnos en el sentido de que, más allá del contexto en el que puede desenvolverse el país, que es cambiante, la realidad es que Córdoba debería ser una isla y plantear que, quien haga negocios con Córdoba, tendrá condiciones determinadas que no se van a modificar, independientemente de lo que pase a nivel país.

–¿Deberíamos focalizarnos en algún rubro en particular, por ejemplo, agroalimentos?

–Tenemos todo y podemos ser fuertes en lo que queramos. El desafío, en realidad, pasa por ser mejores en los rubros que tenemos en la actualidad: alimentos, automotrices, pensar que la tecnología tiene que ser una pata de desarrollo de cada una de las industrias. La industria 4.0 es eso. Tenemos que ser más eficientes y mejores.

–¿Tenemos la inteligencia para eso, en recursos, en dirigentes?

–Hay que buscar una interacción permanente entre lo público y lo privado. Es muy importante para la reatroalimentación. El objetivo es que Córdoba esté inserta en el mundo con oficinas propias, negociando permanentemente. Ahí el futuro puede ser muy auspicioso.

115 personajes piensan el 2030

En el año del 115º aniversario de La Voz, políticos, empresarios, dirigentes, deportistas y personalidades de la cultura reflexionan sobre la Córdoba del futuro.
 

Daniel Griboff, Presidente de Dagri SA. (Pedro Castillo)