El líder del Comité Cívico de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, ofrece renunciar a su candidatura presidencial a las elecciones del 3 de mayo en Bolivia para pactar una de consenso entre todos los opositores al expresidente Evo Morales con el objetivo de que ni él ni su partido, el MAS, vuelvan al poder.
“Hemos puesto nuestra candidatura en blanco, la vamos a poner las veces que sea necesario por Bolivia, pero sentémonos y hagamos una sola candidatura”, sostuvo Camacho tras hacer oficial su oferta.
El dirigente había adelantado vía Twitter que solicitaría al Comité Cívico de Santa Cruz que “convoque a los candidatos presidenciales para tomar acciones urgentes”. “Si seguimos así, Evo vuelve”, advirtió.
El líder cívico envió un comunicado en el que ratifica su compromiso de “poner en blanco” su candidatura, que ya hizo pública el pasado 1ª de febrero, “por la unidad real y por el bien de Bolivia”.
“Quiero reafirmar mi total compromiso con la lucha del pueblo por su libertad y su democracia y por ello estoy dispuesto, como siempre, a entregar todo mi esfuerzo y sacrificio en la defensa de estos sagrados principios”, expresa en la referida misiva.
Camacho solicitó formalmente la reunión de todos los candidatos presidenciales que rivalizan con Morales y el MAS con la intención de llegar a un acuerdo de modo que haya un solo candidato opositor que pelee por el Palacio Quemado.
“Ponemos nuestras candidaturas en blanco por Bolivia. Esto no quiere decir que nosotros nos vamos a bajar solamente porque otros candidatos sumen. Vamos a bajarnos para que todos apoyemos a una sola candidatura”, recalcó.
En opinión de Camacho, “la posibilidad de que el Movimiento al Socialismo vuelva a ser gobierno y de que el tirano de Evo Morales retorne al poder y que se apodere de la Asamblea Nacional echan por tierra el luto y sacrificio de todo el pueblo boliviano”. “No lo podemos permitir”, expresó.
La fe de Arce
El candidato a presidente por el MAS y favorito de los sondeos, Luis Arce, afirma que ganará en primera vuelta y aclaró que será él y no Evo Morales quien tome las decisiones en ese gobierno.
“Somos la única opción popular en el país y la única opción real para volver a darles estabilidad y crecimiento a la economía y a los bolivianos”, aseveró quien fue ministro del área económica durante todo el mandato de Morales (2006-2019).
Arce, para quien Morales es “el líder indiscutible” de su partido, se muestra confiado en virtud de una reciente encuesta que le dio un 31,6% de intención de voto, por delante de sus principales competidores, Carlos Mesa (17,1%) y Añez (16,5%). Incluso afirmó que puede obtener “más”.
De imponerse en las elecciones con el porcentaje que arroja la citada encuesta, el candidato del MAS no ganaría en primera vuelta, ya que para ello se necesita un 50% de los votos más uno o el 40% y una diferencia de 10 puntos sobre el segundo.
Sin embargo, el economista, de 56 años, no cree que se dé ese escenario y vislumbra un triunfo en primera vuelta. “Yo creo que hay un voto oculto todavía en mi país, lamentablemente. Hay temor. Hay mucha persecución política, hay mucho acoso político, cualquier persona que diga que es del MAS es subversiva, es sediciosa”, dijo.
Evo Morales dimitió el pasado 10 de noviembre por las “irregularidades” detectadas por la Organización de Estados Americanos (OEA) en las elecciones presidenciales del 20 de octubre. Más de 30 personas murieron por los enfrentamientos entre simpatizantes y detractores del líder indígena y con las fuerzas de seguridad.
El MAS de Morales y el gobierno interino de Jeanine Añez llegaron a un acuerdo para celebrar nuevas elecciones el 3 de mayo, pero vetaron expresamente al exmandatario como candidato presidencial, por lo que este sólo aspira a un escaño en el Senado.
Las dudas del MAS: Transparencia electoral
El candidato Luis Arce pide observadores internacionales.
Desde el Movimiento al Socialismo (MAS), el partido de Evo Morales, que tiene como candidato en las próximas elecciones presidenciales a Luis Arce, puso en duda que la “transparencia” en los comicios esté garantizada. “Vamos a ganar las elecciones y nadie nos garantiza que nos van a entregar el gobierno. Queremos que las cosas estén claras y que participe la opinión internacional”, expresó el propio Arce, quien lidera las encuestas de opinión con el 31,6 por ciento.