Un juez ordenó este martes al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, a usar mascarilla mientras se encuentre en espacios públicos del Distrito Federal, el territorio en el que se encuentra ubicada la capital, Brasilia, bajo la amenaza de una multa de 2.000 reales por cada día de incumplimiento.
El uso de la mascarilla es obligatorio en la capital brasileña desde el 30 de abril, en virtud de una normativa que, de incumplirse de forma reiterada, podría conllevar la comisión de un delito contra la salud pública susceptible de ser castigado con un año de cárcel.
Bolsonaro apareció en numerosos actos públicos sin mascarilla y sin guardar siquiera las medidas de distanciamiento, a pesar de que Brasil es el segundo país del mundo más afectado por la pandemia de Covid-19 y suma ya más de 1,1 millones de infectados y más de 51.000 fallecidos, según la Universidad Johns Hopkins.
Denuncia
La Justicia federal finalmente intervino a raíz de una denuncia planteada por un abogado a título particular, por entender que la conducta del presidente era “irresponsable” y estaba poniendo en riesgo a la población de una región que hasta ahora ha registrado “uno de las cifras de muertos más bajas” de Brasil, informa O Globo.
El Gobierno del Distrito Federal ya multó al exministro de Educación Abraham Weintraub con 2.000 reales el 15 de junio por no llevar mascarilla durante un acto en Brasilia en apoyo precisamente de Bolsonaro. La mayoría de los asistentes a esta manifestación no llevaban protección.