La pandemia del coronavirus ha paralizado prácticamente a todo el fútbol profesional en gran parte del mundo. Una de las pocas ligas que sigue en pie es la de Hong Kong.

Y allí ayer hubo un partido a puertas cerradas en la que jugó el argentino Jonathan Acosta, uno de los pocos al nivel mundial que no está licenciado. El delantero tiene 31 años, se formó en Talleres, debutó en el Federal A y finalmente quedó libre.

También jugó en Racing de Nueva Italia y tuvo pasos por 9 de Julio de Morteros, Ferro, Excursionistas y el Cefar de Jorge Raffo.

Actualmente juega para los Guerreros de Hong Kong, que este miércoles le ganó un partido clave por 2 a 1 a Kitchee y de esa manera quedó segundo.

En diálogo con ESPN, Acosta se seleccionó desde aquel país junto a su mujer y sus tres hijos.

Contó que las rápidas medidas tomadas a tiempo por el gobierno les permitieron cerrar las fronteras a tiempo y por eso más allá pueden seguir jugando.

“La única gran diferencia es que entramos de un seis al vestuario. Y luego desinfectan todo. Pero por lo que nos dicen por ahora seguiremos disputando los partidos”, sostuvo Acosta. 

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