¿Cómo será la “nueva normalidad” dentro de los shoppings de la ciudad de Córdoba? 

Es posible responder buena parte de esa pregunta a partir de las medidas que incluye el protocolo que trabajaron en conjunto y presentaron a las autoridades, y de la experiencia que ellos mismos están recolectando en provincias donde sus pares ya abrieron.

Con las galerías comerciales autorizadas a recibir público desde este viernes 29 en la ciudad, los shoppings son los próximos en línea para recibir luz verde de parte del Centro de Operaciones de Emergencias (COE) y la administración nacional. Se estima que el OK saldrá en breve. 

“Durante 15 días trabajamos en conjunto, y con apoyo de Adec, el municipio, en un protocolo basado en el diseñado por la Cámara Argentina de Shoppings Centers (CASC). Creemos que garantiza la seguridad del personal y del público, pero somos respetuosos y esperamos la decisión del COE”, asegura Antonio Heinz, director comercial de Nuevocentro.

El directivo recordó además que los centros están operando “sin problemas” desde el arranque de la cuarentena con los rubros que fueron autorizados (supermercados, farmacias y otros), lo que también les permitió desarrollar un entrenamiento.   

Heinz ofició de vocero informal del grupo integrado por ese centro comercial junto a Grupo Libertad, Patio Olmos, Paseo del Jockey y Córdoba Shopping. Todos trabajaron en pulir y consensuar el protocolo, tomando nota de pedidos de las autoridades. El municipio, por caso, fue enfático en incluir medidas que desalienten el uso del transporte público para llegar a ellos. 

Los ocho principales puntos del protocolo que espera luz verde son: 

1) MENOS PÚBLICO. Los shoppings proponen reducir la presencia de público para respetar el distanciamiento social, y adoptaron el parámetro de una persona cada 20 metros cuadrados (el protocolo de CASC establece 1 cada 9 metros cuadrados) que rige para el comercio minorista. Proponen controlar esto con contadores de público en el ingreso y, si no los tienen, con guardias de seguridad. A la vez, se reducirán las vías de ingreso, disponiendo accesos diferentes para clientes y para empleados. 

2) CIRCUITOS INTERNOS. Planean demarcar en su interior un nuevo diseño de circulación para el público, que incluye zonas de giro y sentido obligatorio que impide que la gente se cruce. A la vez, se demarcarán zonas de espera con distanciamiento en el exterior de los locales. 

3) ESTACIONAMIENTO GRATUITO. Para disuadir a clientes y personal del uso de transporte público, los centros acordaron que su oferta debe incluir estacionamiento gratuito. La mayoría ya lo ofrece pero la idea es que todos lo garanticen y en cantidad suficiente. 

Medidas tomadas en Paseo Libertad en la ciudad de Salta.

4) FIEBRE Y BARBIJOS. Sobre el público habrá controles de temperatura al ingreso, paso por sendas sanitizantes y la exigencia de mantener en uso de barbijos en el exterior. Lo mismo para el personal. 

5) CARTELERÍA Y ALCOHOL. En los complejos, se colocará cartelería recordando al público la observancia de diversas medidas preventivas y habrá disponibilidad de alcohol en gel.

6) BAÑOS. Tendrán un esquema de limpieza reforzado como el resto de los espacios, y se administrará el ingreso de público a su interior con limitaciones. 

7) CINES, PATIO DE COMIDAS y LOCALES DE DIVERSIÓN. Los centros no solicitan abrir aún ninguno de esos rubros a la presencia de público, debido a la complejidad de mantener allí el aislamiento. Los locales gastronómicos pueden operar con delivery, y las entregas a repartidores deben hacerse afuera del shopping.

8) HORARIOS. Está a definirse, pero la expecativa es que sea más acotado que el habitual (de 9 a 1).

Clientes: menos y más veloces

El cuadro de la “nueva normalidad” se completará con los cambios de conducta que los consumidores adopten en los centros, algo que también empieza a revelarse. 

Los cordobeses monitorean lo que sucede en provincias donde los shoppings ya están funcionando. Con esa experiencia, sumada a las restricciones protocolares, la expectativa es que una vez que se les permita recibir público el flujo de asistencia podrá ser del 30 a 40 por ciento del volumen normal. 

Otro cambio que se nota en plazas ya abiertas es la reducción de la permanencia en los shoppings. En Córdoba, la visita promedio del consumidor antes de la pandemia era de una hora y media; ahora podría bajar a 30 minutos.  

“La gente va, compra lo que necesita y se vuelve a su casa”, grafican desde los centros comerciales. 

Ese comportamiento también se refleja en las “tasas de conversión” que se registran en los shoppings que hoy funcionan; es decir, en el porcentaje de clientes que compra dentro del total que entra a un negocio. 

“Antes de la pandemia promediaba el 40 por ciento, y hoy está en el 90 por ciento. Eso indica que el que entra compra, va decidido”; explicaron. 

Locales cerrados

Tal como sucede en el comercio minorista que opera fuera de ellos, en los shoppings los alquileres se redujeron drásticamente con el fin de retener locatarios. 

En este punto, los centros (que en Córdoba albergan unos mil locales) ya no cobran alquileres sino sólo expensas. Según trascendió, la vacancia hasta ahora se incrementó entre un cinco y 10 por ciento, valor similar al registrado fuera de ellos. 

En los shoppings de esta ciudad funcionan unos mil locales comerciales.
En los shoppings de esta ciudad funcionan unos mil locales comerciales.
paseo_salta_1590768454.jpg